Pronto llegará el día en que calle tu boca con un muerdo. Mis dientes buscarán tus labios para callar tantas palabras mientras mis manos sujetan tu torso para pasar a la acción. Sobran ya las frases y se palpan las ansias de juntar nuestros cuerpos de una vez por todas, para mordernos, besarnos, lamernos, tocarnos, buscarnos, adentrarnos y dejar que todos los placeres que hemos imaginado nos electricen y sacudan hasta el éxtasis de la pasión.
Basta ya de propuestas, porque las opciones están aceptadas, definida la partida en la que dejarás que te recorra y dejaré que investigues mi piel y mi sexo para que encuentres los rincones que tantas veces has imaginado. No harán falta disfraces porque te quité la máscara y descubrí un rostro que solo dice deseo, y me dejaré poseer y te poseeré por completo, durante los instantes que te regale para descubrir nuestros cuerpos.
No habrá imaginación que supere a una realidad que casi no podremos creer, pero tan real que nos traspasará con los gemidos y risas y juegos preparados para recibirnos con los brazos abiertos.
Se acabó el juego, ahora muevo yo ficha y estás en mi terreno.
Foto de Guilherme Santos, publicada en www.olhares.com